Haiku nace y muere en el mismo instante en que toca la belleza. Por eso se eterniza. Cuando la piel del alma es la médula, los huesos y la sangre de la mística poética. Aquí se muestra el Haiku, Senryû y Tanka, aunque también desde un estilo personal, con una influencia poética desde los antiguos maestros hasta la tradicional contemporánea ubicada entre el s. XIX y la segunda mitad del s. XX. Ryû 龍.
martes, 8 de abril de 2014
Viento
en ráfagas:
vivir en
el otoño
de los árboles.
Sebastiao
Salgado, Refugiados del Campo Korem. Etiopía. 1981.
Me encanta tu blog de haikus
ResponderEliminarTambien las imagenes.
Saludos.